Compétencias déterminantes à su lado

• ÉL PAPEL DEL ABOGADO :

El Abogado goza de una formación altamente cualificada y se encuentra comprometido al respeto absoluto del secreto profesional.
El Abogado presta asistencia a sus Clientes durante todas las etapas de sus dificultades.
Conduce a su término el asunto que le ha sido confiado. 

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  • El Abogado aconseja

Profesional del Consejo, el Abogado está en condiciones de asegurarse de las posibilidades de ejecución de proyectos en el respeto estricto de la reglamentación, en todos campos del derecho (Derecho económico, Derecho social, Derecho fiscal, Derecho de la familia, Derecho de los transportes, Derecho del medio ambiente, Derechos Bienes inmuebles, etc).

Presta asistencia a las personas morales o las personas físicas en la conclusión de acuerdos o, en fase pre contenciosa en la búsqueda de soluciones negociadas.

El consejo en estrategia constituye una de las competencias del Gabinete que puede revelarse determinante para el éxito de su asunto.

Consejo en estrategia

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  • El Abogado redacta

La Lealtad de los convenios, las exigencias de una información perfecta sobre el alcance y la naturaleza de los compromisos tomados, así como la eficacia del acuerdo constituyen principios esenciales, realizados por los Abogados en la redacción de todas las escrituras privadas.

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  • El Abogado defiende

En todo desacuerdo susceptible de una solución amistosa, el Abogado puede, con acuerdo de su Cliente, tomar la iniciativa de una negociación con el fin de asegurar la mejor defensa de sus intereses.

Hay que saber que entre todas las profesiones sólo el Abogado podrá hacer gozar a su Cliente del secreto profesional que envuelve de un secreto absoluto los pasos previos al acuerdo definitivo.

Así, las propuestas amistosas hechas de Abogado a Abogado no podrán ser utilizadas en una futura fase contenciosa contra el que las hizo.

En fin, cuando sólo una solución contenciosa es factible, el Abogado representa y pleitea tanto en primera instancia como en Apelación, delante de todas las jurisdicciones de la orden judicial (Tribunales de Instancia y de Gran Instancia, Tribunales de comercio, Magistratura del trabajo, Tribunal de Apelación), ante de los Tribunales Administrativos y los Tribunales administrativos de Apelación, así como ante de todos los organismos judiciales (tribunales paritarios y administrativos, consejos de disciplina) y ante de las jurisdicciones arbitrales.

• EL ABOGADO REPRESENTANTE DE LA JUSTICIA

Protector de las libertades públicas y privadas, es también el garante de los derechos de las personas físicas y morales.

A este cargo y para asegurar su misión, goza de dos ventajas relevantes :

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  • El secreto profesional

El secreto profesional que le vincula al abogado a su cliente en toda circunstancia es una garantía fundamental.

La especificidad de su misión hace del abogado el guardián de los secretos de su cliente.
Ninguna persona puede obligarlo a revelar lo que le ha sido confiado en calidad de secreto o de confidencia.
Ni siquiera un juez, ni el cliente mismo...
La ley refuerza aun más esta regla deontológica y el respeto del secreto profesional y se apoya no sólo en la actividad judicial del abogado sino también en la consulta jurídica del consejo dado a un cliente...
General y absoluto, este principio esencial, además, es ilimitado en el tiempo.

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  • La confidencialidad

La confidencialidad cubre las comunicaciones verbales y los intercambios de cartas entre Abogados.

Así un abogado no puede hacer pública una carta de uno de sus colegas y utilizarlo por ejemplo en un proceso a menos que hubieran decidido por acuerdo común conferir a sus intercambios de correspondencias un carácter oficial.

Esta confidencialidad es un instrumento indispensable para la claridad y para la neutralidad de la negociación.

Permite en efecto hacer una propuesta o ajustar una oferta inicial en toda confianza y en caso de fracaso nadie será informado sobre las concesiones recíprocas que cada uno estaba dispuesto a hacer.

Y esto, hasta que la transacción sea firmada o el desacuerdo consumado.

Se trata de una seguridad jurídica esencial y suplementaria que permite evitar muchos procesos.

Sólo una negociación llevada por dos abogados puede ser llevada con esta eficacia a la cual no sabrían aspirar los interlocutores que actuarían como privado o no pertenecerían a la profesión.

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  • Deber y necesidad: la lealtad garantizada por un proceso equitativo.

Fuente del debate contradictorio, el principio esencial de la lealtad exige al abogado la obligación de comunicar a su colega la totalidad de las piezas o los documentos en los cuales funda su argumentación ante una jurisdicción, con el fin de permitir a la otra parte de analizarlos y discutirlos.

Esta obligación deontológica que consiste en poner en ejecución un debate contradictorio, es indispensable para garantizar un proceso equitativo y una negociación en igualdad de condiciones; lo que depende de una exigencia esencial : la regla del conflicto de intereses.

Ningún abogado puede aconsejar o defender dos partes de las que los intereses podrían oponerse.

Una vez surgido un conflicto de intereses- o es susceptible de surgir - entre los diferentes clientes del mismo abogado, este último tiene que abstenerse.

Este principio garantiza la independencia del abogado de lo que resulta que no puede favorecer uno de sus clientes en detrimento de otro.

También contribuye a esto, asegurando el respeto del secreto profesional, el abogado que no puede utilizar una información que detiene de uno de sus clientes para servir o favorecer los intereses de otro.

En fin un abogado no puede tampoco aceptar aconsejar o defender a un nuevo cliente cuyos intereses serían contrarios a los de un cliente anterior.